Recordando el 2011…
Cuando termina un año es bastante frecuente oír comentarios sobre si ha sido bueno, malo o regular, lo que nos invita a reflexionar sobre cómo ha resultado para nosotros.
En mi caso, me resulta bastante complicado definir este año con una etiqueta tan simple, pues se han sucedido y solapado acontecimientos maravillosos con otros realmente muy duros, sobre todo un problema de salud del que todavía estoy recuperándome y que espero que dentro de poco sea sólo uno más de esos malos recuerdos que afortunadamente los mecanismos de defensa de nuestra mente se encargan de difuminar.
Simultáneamente a ese trance por el que me ha tocado pasar, y que todavía me tiene de baja, he vivido (sin poder disfrutarlo plenamente) uno de los momentos más gratificantes de este año: la obtención de una plaza de asesor en el CEP Marbella-Coín, puesto al que espero poder incorporarme muy pronto, a ser posible nada más terminar las vacaciones. Tengo mucha ilusión por vivir esta experiencia que estoy seguro de que me resultará muy enriquecedora, tanto a nivel profesional como personal.
Todo eso ha sido durante el último trimestre del 2011, que también es el primero de un curso escolar que he empezado en el centro en el que tengo mi destino definitivo, el IES Vega de Mijas, en el que sólo pude dar 5 o 6 clases a mis 240 alumnos y alumnas de 1º de ESO, muy pocas para poder enseñarles algo más que tres piezas con la flauta, pero suficientes para tomarles mucho cariño y sentir cierta nostalgia cada vez que recibo uno de esos afectuosos mensajes de ánimo que me mandan a través del Tuenti… doce añitos, tan chiquitos y tan grandes.
Durante este último trimestre, por lo que ya he dicho, el ritmo de publicación de este blog ha disminuido enormemente. Eso, sumado al hecho de que durante lo que queda de curso no estaré en el aula, me ha hecho plantearme la posibilidad de cerrarlo, no en el sentido de retirarlo de la red, pero sí de darlo por concluido publicando un último post de despedida y cerrando los comentarios. Lo dije anteayer durante una cena con gente muy cercana a mi, cuatro excelentes blogueros, Benjamín, Javier, Mayti y Piluca, y mi musa. Esas palabras provocaron una reacción tan vehemente de mis amigos que me ha convencido de que educacionmusical.es tiene que seguir.
Este blog, además de servirme de apoyo a las clases y de proporcionar a mis alumnos y alumnas una herramienta de estudio y de encuentro, me ha dado grandes satisfacciones: sin ir demasiado atrás en el tiempo y quedándonos en el año que está a punto de finalizar, el pasado mes de febrero recogí uno de los Premios a Materiales Educativos del ITE, un momento inolvidable en el cual, además de recibir un galardón que premia el blog y, sobre todo, la labor educativa que está detrás de él, tuve la oportunidad de conocer personalmente a algunas de las estupendas personas que trabajan en el ITE, como Carlos, Antonio, Raúl o Ismaíl, a quienes tuve ocasión de volver a ver en diversos eventos, cosa que espero que se repita con frecuencia.
Tanto antes como después de este día, he recibido las felicitaciones de mucha gente de mi ámbito laboral, lo que me ha gratificado enormemente porque desmiente, por lo menos en buena parte, una frase que suele oír quien se implica en este trabajo más allá de sus estrictas obligaciones: nadie te lo va a agradecer. Sin embargo, además del agradecimiento tácito pero sincero y profundo de mis alumnos y alumnas, los únicos en los que pensaba cuando abrí este blog, recibí el reconocimiento del delegado provincial (excelente músico y docente) y del consejero.
También me felicitó el inspector, lo que, junto con el aprecio de los ya citados representantes de la Administración educativa, compensó con creces el hecho de que (parafraseando a una de las premiadas en la más reciente edición de los premios Espiral Edublogs) mi directora no está aquí y mi claustro no me ha felicitado. Aunque cueste creerlo, la directora y el jefe de estudios de mi centro han demostrado un desinterés que roza el desprecio a mi labor y a mi ofrecimiento ―totalmente desprendido y manteniendo no 18 sino 21 horas lectivas― de poner mi experiencia a disposición del centro. Pero ya se sabe: nemo propheta in patria sua.
Entre los acontecimientos que quiero recordar aquí, de los muchos que han ocurrido en este tan intenso 2011, obviamente no puede faltar la publicación de Experiencias educativas en las aulas del siglo XXI – Innovación con TIC, presentado el pasado mes de junio en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
Participar en la coordinación de este libro, un proyecto que recoge las aportaciones de más de un centenar de docentes de toda España, ha sido una gran oportunidad de colaborar con unas personas para las que el adjetivo excelente se queda corto, tanto desde el punto de vista profesional como humano, y de aprender mucho de ellos. Hablo de Azu Vázquez, Diego Sobrino y Pep Hernández, los otros tres coordinadores, y de Juanmi Muñoz y Esther Subias, respectivamente presidente y vicepresidenta de la Asociación Espiral.
Las pocas horas que quedan para que termine el 2011 no las quiero dedicar a recordar el pasado, sino a imaginar el nuevo año, para el que ya tengo en mente varios proyectos, y desearos a todos vosotros, lectores y lectoras de este blog, que en él se cumplan vuestras más ansiadas ilusiones.
Conocerte, y conocer tu trabajo, Massimo, es la mejor forma de explicar lo que es un buen docente y una buena persona. Un lujo trabajar+disfrutar+aprender contigo.
Un fuerte abrazo para tí y para Pepa, y mis mejores deseos para este 2012 que está a puntito de caer.
Así leído, del tirón, parece que hubiera pasado un lustro en vez de un año, tan intenso y lleno de hechos y vivencias está. Alguna fue triste y dura pero la gran mayoría llena de trabajo bien hecho y justo reconocimiento que compensan lo anterior.
Como testigo en la distancia de este magnífico anuario personal y profesional quiero felicitarte por tu siempre ejemplar respuesta: humildad y realismo ante los premios y reconocimientos, entereza e increíble capacidad de superación cuando la cosa se pone realmente chunga.
PD. Llamarme bloguero es como calificar a Paquirrín de líder social, pero sé que lo haces desde el cariño así que te voy a aceptar pulpo como animal de compañía 😉
Muchísimas gracias por haber tomado la decisión de seguir con este maravilloso blog, referente para los que como tú nos dedicamos a la educación musical. Darte la enhorabuena por él, y también por tu nuevo puesto, seguro que será una experiencia muy gratificante. Curiosamente yo también me incorporo al CEP de Sevilla en enero, aunque para una vacante, así que podremos seguir compartiendo inquietudes. Y continuando con las coincidencias, también pasé hace no mucho por un trance similar al tuyo, así que no te preocupes, ya verás como todo te va a ir bien. Mis mejores deseos para el 2012 y mucho ánimo compañero!!!
A mi ya me mencionaste que te planteabas cerrar el blog y yo ya te comenté que no podías hacer eso, ni a ti ni a nosotros, porque lo que hemos aprendido con él y lo que nos queda por aprender de ti y tu blog no está escrito y debe seguir adelante cada día… Se pasan momentos difíciles en la vida, pero como tu bien dices, será un capítulo que podremos borrar y añadir más capítulos a los sucesivos años que vienen.
Yo personalmente tengo que decir y como siempre digo cuando presento tu blog en los cursos: «Es Massimo de nombre, pero también como persona, de corazón y todo lo que enseña a los demás es grande como él».
Para mi la mejor persona que he conocido en el IES Vega de Mijas y si alguna vez me cambian de centro, espero siempre mantener la amistad que tenemos . Gracias por lo que me has ayudado, aconsejado y enseñado, me alegro que este blog siga adelante.
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Diego y Rosa, os contesto juntos por las muchas cosas que tenéis en común (ambos de Historia, ambos tan jóvenes y a la vez dotados de unos conocimientos y una preparación que ya quisiéramos los que «tenemos más experiencia» -ya se sabe, la cantidad no vale tanto como la calidad-, ambos con un entusiasmo y una capacidad de trabajo arrolladores y contagiosos, ambos tan estupendas personas: cariñosos, atentos, altruistas y un largo etcétera): simplemente, ¡me encantáis!
Javier: insisto en que la calidad cuenta mucho más que la cantidad. Aún así, tal como te he dicho en más de una ocasión, me encantaría que escribieras más, pues es una delicia leer un pensamiento tan lúcido, una redacción tan precisa y un humor tan fino como los tuyos.
Andrés: gracias por tantos halagos que no se merecen. Me alegra saber que viviremos simultáneamente la experiencia de la asesoría de formación y espero que el problema de salud al que te refieres esté totalmente resuelto. Seguimos en contacto.
A los cuatro: un afectuosísimo abrazo.
Hola, Massimo. No sabía que estabas pasando por un momento difícil. Conociendo la pasión que sientes por la educación musical, la ilusión y la profesionalidad que derrocha tu blog, ese brillo especial en la mirada al hablar de música, que pude ver en Madrid, creo que tienes energía suficiente para salir adelante muy pronto y seguir impresionándonos con mil y un proyectos.
Gracias por continuar con el blog y servir de inspiración a tantos otros.
Adelante y mucho ánimo.
Hola Adriana, muchas gracias por tus palabras que, viniendo de ti, halagan el doble (ya sabes cuanto me gusta tu aula musical y lo mucho que aprendo con ella).
Un abrazo muy fuerte y feliz año nuevo.
¡Muchas gracias por seguir!
Aunque no nos conocemos personalmente eres una de mis mayores referencias de música-con-tic…¡y sin-tic!…
Sé lo que se siente al ser «invisible» en el cole. Siempre digo que los de Música somos los «cenicientos» de los Centros. Pero algún día se darán cuenta de que sin arte dejamos de parecer humanos…
¡ÁNIMO! Te espera un año nuevo mucho mejor.
Un abrazo de Mª Amelia
Massimo, que te hayas planteado cerrar el blog me parece una barbaridad.
Que te vayas como asesor del CEP, me alegra por ti y por los profesores a él adscritos, pero me hace lamentarlo por tus alumnos. Así es la vida: unos ganan y otros pierden.
Un abrazo, carissimo, y muchísima suerte en esta nueva etapa.
Mª Amelia: muchas gracias por tus palabras, tan cariñosas como exageradas. 😉
Lo que dices es totalmente cierto: en nuestra escuela se valora en su justa medida la expresión escrita (no así la oral) pero se descuidan totalmente otras formas de expresión tan importantes como aquella. Pero ese es tan sólo uno de los tantos obstáculos que hay que sortear en nuestro trabajo diario, y en este caso concreto no ha sido determinante.
Un fuerte abrazo y muchos deseos de un año estupendo.
José Luis: todo no se puede tener en la vida, hay momentos en los que es necesaria una elección. En este caso se trata de un solo curso escolar, por lo que el año que viene, gracias también a la experiencia que viviré en mi nuevo destino, espero poder compensar a mis alumnos y alumnas de 1º de ESO por lo que no puedo darles este año.
Un fuerte abrazo y feliz año.
Querido Massimo:
Créeme, hago un esfuerzo porque las palabras no salgan demasiado ampulosas, lo que no es fácil en estas fechas. En fin,… vuelve a tus quehaceres, aquí o allá, seguro que será una labor provechosa y digna, como la que has demostrado hasta ahora en tu estupendo blog.
Un abrazo,
Paco.
Hola Paco,
Muchas gracias por tus palabras.
Te deseo un 2012 lleno de alegrías y éxitos.
Un abrazo